Ciudad de México, 16 de octubre de 2012.- Horas y horas en el simulador y todo un fin de semana en el kartódromo de Valle de Bravo inspiran a Ricardo Pérez de Lara la confianza suficiente para llegar en gran forma al Finale GT Tour, que se disputará del 26 al 28 de octubre en el circuito francés de Paul Ricard, en la localidad de Le Castellet.
A una semana de emprender el viaje rumbo a París, el piloto del Telcel Racing ya tiene una idea bastante clara del veloz trazado de 3.8 kilómetros, que durante la década de los 70 y 80 fue sede del Gran Premio de Francia de Fórmula Uno.
«No conozco la pista pero he estado practicando en el simulador y veo que es muy rápida. Es el tipo de trazado que más me gusta. Lo que más se le asemeja en México es la del Hermanos Rodríguez», explicó Ricardo, quien correrá la gran final de los SEAT León gracias a su título en la Súper Copa Telcel en 2011.
Pese a las horas en el simulador, el conductor capitalino está consciente de que la realidad puede ser muy distinta, por lo cual el reto será aprenderse los trucos de la pista lo más rápido posible, pues el viernes 26 sólo tendrá un par de ensayos de media hora, antes de la sesión vespertina de calificación, ese mismo día. El sábado se correrá la primera prueba y el domingo la segunda, ambas a un máximo de 30 minutos.
Pérez de Lara correrá en el auto marcado con el número 22 con el equipo SEAT Sport de España, donde trabajará con el ingeniero Juan Manuel Pinel, aunque por si las dudas viajará junto con Nahum Olín, director del equipo Telcel Racing, el ingeniero Nahum Olín Jr. y su coequipero Eduardo de León.
Ricardo ha estado en constante comunicación con el equipo, afinando detalles para la gran cita, en la que será el único representante del Continente Americano entre los 30 contendientes, todos ellos de los seriales de Súper Copa SEAT León de Europa y Asia, y la mayoría ya con experiencia en Paul Ricard.
No es la primera vez que Pérez de Lara correrá en Francia, ya lo hizo en 2005 en la final de la Clío Cup celebrada en el circuito de Magny-Cours, donde finalizó en la séptima posición entre 42 autos en contienda, aunque ahora desde luego el objetivo es la bandera a cuadros.
