En la que se recordará como una de las competencias de Indycar más accidentadas de su historia, el piloto venezolano Ernesto José Viso finalizó el domingo en el décimo tercer lugar en las calles de Baltimore, en los Estados Unidos, carrera en la que el caraqueño llegó a ocupar el quinto lugar cuando a pocas vueltas del final no pudo esquivar una colisión múltiple que una vez más frustró sus opciones de batallar por un lugar en el podio.
Luego de partir desde el vigésimo lugar sobre la irregular superficie de las calles de Baltimore, EJ Viso comenzó una sólida recuperación en la que se mantuvo alejado de los primeros incidentes, lo que sumado a la buena estrategia de paradas en los pits, lo proyectaba como uno de los favoritos a luchar por el triunfo en la parte final de la competencia pautada a 75 giros.
Sin embargo, en vuelta 57, Viso, al volante de un monoplaza del equipo Andretti Autosport Team Venezuela, se encontró con la pista bloqueada en la mitad de la primera curva en uno de los numerosos reinicios tras un toque que propició el español Oriol Serviá, lo que generó una colisión que dejó detenidas a varias máquinas, incluida la del venezolano y la del colombiano Sebastián Saavedra. Una vez despejada la pista, Viso cayó al décimo octavo lugar, a una vuelta de los líderes.
“Fue una carrera súper difícil, esto fue una carnicería – aseguró EJ Viso – básicamente no se trataba de quién era el más rápido o del que tuviera la mejor estrategia, sino de quién se libraba de cualquier problema o accidente, algo que logré hacer hasta que faltaban unas 16 vueltas cuando fui víctima de un choque múltiple que arrastró a 6 ó 7 carros, ahí perdimos todas nuestras oportunidades que teníamos para ganar la carrera o muy seguramente alcanzar el podio, tenía un buen ritmo, un buen consumo de combustible. Sinceramente fue una lástima”.
Durante las clasificaciones realizadas el sábado, Ernesto Viso apenas pudo completar una vuelta durante su turno que se vio interrumpido por una bandera roja, para posteriormente rozar el muro de la chicana en la única vuelta disponible que tuvo a disposición, hecho que lo dejó en el vigésimo puesto en la formación de largada.
La prueba de Baltimore que tuvo siete líderes distintos y que acumuló hasta 6 neutralizaciones para un total de 25 vueltas (una tercera parte del recorrido total), estuvo marcada por numerosas polémicas, aunque ninguna más evidente que el percance que involucró al australiano Will Power y al neozelandés Scott Dixon, choque que los sacó a ambos de carrera y que por segunda carrera seguida favoreció de manera directa al compañero de Power, el brasileño Helio Castroneves.
El triunfo en la décima sexta válida de Indycar correspondió al francés Simon Pagenaud, en un Dallara Honda del equipo Sam Schmidt Motorsports. La próxima fecha se disputará el 4 y 5 de octubre en las calles de Houston, en Texas, doble ronda que puede definir el nombre del nuevo monarca.