ERNESTO VISO CONTENTO PESE A DECEPCIÓN FINAL EN INDY 500

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Luego de ser uno de los protagonistas absolutos de la edición 97 de las 500 Millas de Indianápolis, el venezolano Ernesto José Viso relató los instantes cruciales que cambiaron el rumbo de su presentación al apagarse el motor de su máquina durante la sexta detención para cargar combustible y sustituir los neumáticos.

En una combinación de factores técnicos y humanos, el propulsor Chevrolet de Viso se apagó en el instante en el que los mecánicos del equipo Andretti Autosport Team Venezuela habían culminado el reaprovisionamiento, desafortunado percance que se presentó en el preciso momento cuando le indicaron al piloto que podía incorporarse a la pista.

Normalmente un incidente de ese tipo se resuelve en no más de 7-8 segundos al conectarse el motor de arranque auxiliar, pero la labor se extendió por casi medio minuto, una eternidad cuando el grupo de líderes se encontraba en un ritmo muy cerrado, motivo por el que EJ Viso pasó del sexto al vigésimo quinto peldaño.

“Me encuentro extremadamente feliz por toda la escudería Andretti Team Venezuela. Ha sido una mejora asombrosa para todos, especialmente para mí y mi carrera – destacó Ernesto José Viso – Estar junto a este equipo significa mucho. Haber tenido la oportunidad de estar entre los cinco primeros en estas 500 Millas de Indianápolis durante tres cuartas partes de la competencia fue increíble, poder mantenerme al frente luchando por el triunfo es el lugar donde debo estar todo el tiempo. Tuvimos un pequeño problema en los pits: seleccioné neutro demasiado rápido y el motor se apagó y eso lamentablemente arruinó nuestra carrera. Esperábamos por una bandera de precaución en la última parte, pero tal vez no tanto, quizás a unas 23 vueltas para el final, y eso nos habría permitido al menos luchar entre los diez primeros. Estoy satisfecho por el equipo, muy contento por todos ellos. Tenemos un auto muy fuerte y este año alcanzaremos muchas satisfacciones”.

Al retornar a la pista, el caraqueño Viso se encontró a unos 33 segundos del grupo de líderes, sin haber perdido la vuelta con relación a la cabeza de la prueba, pero descolgado del pelotón, con el agravante de rodar las últimas 30 vueltas sin aprovechar la succión del grupo, lo que le habría permitido aprovechar el gran rendimiento de su máquina.

La bandera de precaución arribó demasiado tarde para los intereses del venezolano, recién en la vuelta 194, por lo que Viso sólo pudo mejorar unas cuantas posiciones en las 2 vueltas que se dio vía libre antes del accidente final del escocés Dario Franchitti que le aseguró el primer triunfo en Indy 500 al brasileño Tony Kanaan. El criollo finalizó en la posición dieciocho, su mejor resultado en las seis presentaciones en las 500 Millas de Indianápolis.

Viso llegó a liderar la carrera en dos ocasiones, la primera vez en la vuelta 90 y posteriormente entre los giros 132 y 135, para un total de 5 de las 200 rondas que constó la prueba. Se registraron un total de 5 períodos de neutralización, para un total de 21 vueltas, mientras entre los giros 61 y 193 la pista estuvo siempre libre, lo que permitió que el promedio de velocidad de la competencia fuera de 187,4 millas por hora, equivalentes a 300 kilómetros por hora.