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EL PILOTO DE VOLKSWAGEN, SÉBASTIEN OGIER, CREE QUE SU AGÓNICA VICTORIA EN EL RALLYE DE SUECIA FUE UNA DE LAS MEJORES DE SU CARRERA.
El francés se aseguró el triunfo a cinco kilómetros del último tramo, cuando su compañero de equipo Andreas Mikkelsen tuvo una salida de pista y un trompo y tiró por tierra su ventaja de 2.7 segundos.
Fue un resultado de ensueño para Ogier, que como líder del campeonato, tuvo el dudoso honor de abrir pista a través de los tramos cubiertos de nieve en las jornadas del viernes y del sábado. Todo se le complicó todavía más en el segundo bucle del viernes, cuando perdió 30 segundos en un banco de nieve.
“Llegué aquí con serias dudas de si podría pelear por la victoria”, reconoció Ogier. “Sabía que tendría que hacer frente a condiciones difíciles, así que decidí tomar todos los riesgos y ataqué desde el primer tramo hasta el final. Tuve algunos pequeños problemas, pero hemos pilotado por encima del cien por cien todo el tiempo. La última especial ha tenido un final increíble. Estoy muy orgulloso de esta victoria. Sin duda, es una de mis mejores”.
Ogier mantuvo su estrategia de ir a fondo en el Power Stage final, sumando tres puntos extra a los 25 que obtuvo por la victoria en el rallye.
“He vivido algunas situaciones parecidas en el pasado”, añadió. “Recuerdo el Rallye de Jordania de 2011, cuando tuve que luchar con Jari-Matti. Estaba cinco décimas de segundo por detrás antes del último tramo y al final vencí por dos décimas. Fue igual de emocionante aquí, pero de alguna manera es más fácil correr así, ya que sabes que tienes que ir a tope, no hay dudas”.
Esta victoria es la 26 del francés en el Campeonato del Mundo de Rallyes, empatando así con el Campeón del Mundo de Rallyes de 1990 y 1992, Carlos Sainz. El piloto de Volkswagen ocupa ahora la tercera posición empatado con el español en la lista de pilotos con más victorias de todos los tiempos, solamente superado por Marcus Gronholm (30 victorias) y Sébastien Loeb (78 victorias).