- El piloto del Repsol Rally Team ha superado la exigente segunda etapa en un brillante 15º lugar absoluto.
- “Estamos contentos con el resultado, pero sobre todo porque ahora somos más rápidos, sin necesidad de arriesgar más”.
Conforme avanza la carrera y se incrementan las dificultades, mejor le van las cosas al Repsol Rally Team en el Rally de Marruecos. Este sábado, Isidre Esteve ha salvado la dura segunda etapa que ha dejado fuera de combate a varios de los favoritos. El piloto de Oliana no ha sido uno de ellos, sino todo lo contrario, ya que cada vez se muestra más competitivo y ha firmado un brillante 15º lugar absoluto, que le sitúa 13º de la general.
La jornada transcurría por los alrededores de Erfoud, con 329 cronometrados de los 365 totales. Isidre Esteve y su copiloto Txema Villalobos han protagonizado una actuación muy regular, a una velocidad constante y sin apenas cometer errores, lo que les ha permitido sortear todos los obstáculos que se han cruzado en su camino hacia la meta. Su tiempo de 4h 51:26 les ha consolidado en el grupo delantero de esta prestigiosa prueba de la Copa del Mundo de Rallys Cross-Country en la que se citan muchos equipos dakarianos.
“Ha sido una etapa complicada, con mucha navegación, pistas difíciles, pequeñas dunas y mucha hierba de camello. Ha llovido hace poco y el agua ha borrado las pistas, lo que hace muy difícil encontrar algunos puntos de paso. Pero, a pesar de todo, hemos conseguido marcar un buen ritmo y estamos realmente satisfechos”, explicaba el piloto de Oliana.
Su principal contratiempo se ha producido hacia el ecuador de la especial. “Hemos llegado al paso de un río con mucho barro y, para no encallar, hemos tirado marcha atrás, con tan mala fortuna que nos hemos quedado enganchados sobre una hierba de camello, con las cuatro ruedas en el aire. Nos ha ayudado a salir el holandés Michael Willems pero luego se ha quedado él en el fango y, por supuesto, le hemos devuelto el favor. Cuando hemos llegado a meta, los dos nos hemos abrazado”, desvelaba Isidre Esteve.
Y es que la jornada ha tenido fuertes dosis de emoción y de épica, que algunos candidatos al triunfo no han logrado superar. “En este tipo de carreras suelen surgir muchos problemas y cualquier día te puede pasar a ti. Por ello, nosotros debemos intentar ir lo más rápido posible, aunque sin arriesgar y siempre respetando al máximo la mecánica. Se trata de encontrar el equilibrio ideal… aunque eso tampoco te garantiza nada”, reconoce.
De lo que Isidre Esteve no tiene ninguna duda es del salto cualitativo que su vehículo preparado por Sodicars Racing ha experimentado esta temporada gracias a las últimas evoluciones: “Tenemos mucho más ritmo que el año pasado y la misma sensación de seguridad. Hemos subido mucho el nivel de competitividad, pero sin correr más riesgos y eso es lo más importante. Sin duda, vamos por el buen camino en nuestra preparación para el Dakar 2019”.
Mañana domingo Esteve y Villalobos tratarán de mantener la buena línea durante otra compleja jornada de 317 kilómetros (289 cronometrados), con las dunas y la arena de protagonistas. Con un tiempo acumulado de 8 horas, 16 minutos y 59 segundos, Isidre Esteve partirá como 13º clasificado de la general y segundo de su categoría T1.2 (vehículos todo terreno modificados diésel). Él, sin embargo, insiste en que “yo no miro la clasificación, solo me preocupa el ritmo de carrera y, sobre todo, que las sensaciones al final del día sean buenas”.