- El piloto alemán llega a la cumbre al imponerse en el sensacional duelo de World Supersport.
Dar el salto al Campeonato del Mundo FIM Supersport desde una moto prototipo siempre comporta un riesgo, pero Sandro Cortese (Kallio Racing) ha hecho que pareciera más fácil, y se ha proclamado campeón mundial de la categoría en la última carrera del calendario 2018. Echando mano de su experiencia, velocidad pura, talento para competir y un tenaz espíritu de lucha, el piloto alemán ha brindado espectáculo a los fans hasta la última vuelta, hasta atrapar el título con una magnífica actuación en Qatar.
Es el colofón soñado para un contendiente que llegó a última hora, ya que desembarcó en su nuevo paddock cuando faltaba apenas una semana para que arrancara el Campeonato del Mundo MOTUL FIM Superbike 2018, anunciado por el Kallio Racing como el piloto que completaba su formación por el nuevo curso.
Pero pronto se vio que Cortese había llegado para ser protagonista. Campeón del Mundo de Moto3 de 2012 y figura emblemática durante años en el paddock de MotoGP™, el germano se puso el traje de faena desde la ronda inaugural, en Phillip Island. Se había familiarizado con la Yamaha YZF-R6 en un par de tests previos al pistoletazo de salida, pero fue suficiente para poder codearse con los corredores experimentados de la parrilla y luchar por un cajón del podio. Fue tercero, detrás del defensor del título, Lucas Mahias, y de Randy Krummenacher.
A continuación fue cuarto bajo el sofocante sol de Buriram, una pista desconocida para él, mientras afilaba sus armas para el inicio de la etapa europea, donde dispondría de escenarios más propicios. MotorLand Aragón era la primera y para Cortese marcó el inicio de su carga por el campeonato. En el trazado español tomó la pole position y conquistó su primera victoria tras un intenso pulso con Federico Caricasulo y Jules Cluzel. El alemán se consagraba en la categoría, pasaba de la cuarta a la segunda posición del Campeonato y se situaba a sólo 4 puntos del líder Mahias.
Las carreras de Assen (6º) e Imola (4º) le enseñaron que las cosas no serían tan fáciles para él en una categoría tan competitiva como World Supersport, pero en Donington Park dio un nuevo golpe de autoridad. En su retorno a la pista británica por primera vez desde 2009 -cuando competía en 125cc- Cortese batalló con Jules Cluzel, a esas alturas su ya declarado rival por el título, y se impuso en la línea por 1.3s sobre el francés. Su segundo triunfo del año valía además el liderato del campeonato, con una ventaja de siete puntos.
En el Automotodrom de Brno, el alemán no pudo convertir su pole position en una victoria, pero fue segundo detrás de Cluzel tras otro duelo eléctrico. El piloto galo hacia sentir su presión, y el duelo se trasladó a Misano, la última etapa antes del largo parón veraniego. La pista italiana se reveló un obstáculo complicado para Cortese y su Yamaha, pero pudo convertir su quinta posición en parrilla en un tercer puesto en la carrera, precediendo al francés. Como resultado, se fue de vacaciones con una ventaja de cinco puntos en el campeonato.
El retorno a la competición, en Portugal, ofreció un nuevo y dramático episodio del mano a mano entre los dos rivales. En la segunda vuelta de la carrera, Cortese se fue al suelo tras adelantar a su rival y éste no pudo evitar la moto del alemán. Sólo uno de ellos, el líder del campeonato, pudo levantar la moto. Cluzel tuvo que abandonar, víctima de un lance de carrera, pero Cortese protagonizó una gran remontada y salvó un 5º puesto, 11 valiosos puntos y su ventaja en la clasificación.
Cluzel se desquitó en su circuito de casa, Nevers Magny-Cours, donde se impuso en el undécimo Round del año, pero el germano se aseguró el segundo puesto tras una tenaz persecución. Se fue de Francia con una ventaja de 11 puntos y la oportunidad de ganar el título en Argentina.
Cerrada la campaña europea, el desenlace del Campeonato se trasladó a tierras lejanas. En el Circuito San Juan Villicum, el piloto alemán protagonizó una carrera de menos a más, pero no pudo impedir un nuevo triunfo de Cluzel, lo que trasladaba la resolución del título a Qatar, donde su brillante desempeño en la dramática carrera al sprint de este sábado le ha servido en bandeja la corona de Campeón del Mundo FIM Supersport 2018.
Cortese es el segundo alemán que conquista el título de WorldSSP, reverdeciendo el éxito de Jorg Teuchert, que lo ganó en la temporada 2000, y pasa a la historia como el primero que se pone la corona de Moto3™ y World Supersport.
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