Un paso fronterizo al final de la jornada y dos recorridos diferenciados para las categorías de coches/camiones y motos/quads, así podríamos resumir la quinta etapa de esta edición 2013. Para los competidores, sin embargo, lo fundamental no es eso, sino el hecho de que se van a enfrentar a paisajes radicalmente distintos a los que han visto hasta ahora. Atrás quedarán las dunas para dar paso a caminos pedregosos y ríos, así como una sucesión de valles. Comenzaremos directamente con la especial (136 km) de motos y quads, para pasar después a un enlace de 284 kilómetros para los coches y camiones antes de abordar un sector cronometrado de 172 kilómetros. Hacia el final de la etapa, los vehículos acumularán ya más de dos mil kilómetros bajo sus ruedas desde que arrancara la presente edición del rally. Las penurias de los Iveco de De Rooy este martes nos recuerdan que ni favoritos ni líderes se escapan a los antojos del Dakar. ¿Y qué ocurrirá si Stéphane Peterhanse, líder en cóches, o el trío galo integrado por Pain, Casteu y Despres en motos se relajan…? Deberán andarse con mucho ojito, pues las consecuencias pueden ser inmediatas…
