Con 630 kilómetros de recorrido y 430 de ellos de especial, esta cuarta etapa no será precisamente un paseo por el campo. De hecho, se podría decir que esta vuelta en torno a San Salvador de Jujuy parece ya una primera prueba de fuego. En el programa del día entran cambios de ritmo incesantes, una alternancia de terrenos arenosos y pedregosos y, a modo de guinda, una altitud media durante la especial de 3500 metros. Y por si eso fuera poco, se trata de la primera parte de una etapa maratón en la que los vehículos se colocarán en parques cerrados en el momento en el que lleguen al vivac.