- Iannone y Aleix fueron 6º y 10º después de pujar por el podio en Phillip Island después de haberse codeado con los pilotos más rápidos.
La gris actuación en el Gran Premio Motul de Japón ya es historia. Aprilia remontó el vuelo a lo grande este fin de semana en Australia al firmar su mejor resultado en MotoGP™ después de dos grandes actuaciones de Andrea Iannone y Aleix Espargaró, que finalizaron 6º y 10º, respectivamente, tras un arranque de carrera para enmarcar.
Los dos pilotos de Aprilia Racing Team Gresini dejaron su huella partiendo 7º y 8º en una tercera fila de la parrilla que completó el héroe local Jack Miller (Pramac Racing). Unas posiciones de salida históricas para Aprilia, que nunca antes había contado con dos pilotos entre los 10 primeros en la parrilla de salida.
Tras la misma, ambos crecieron con el paso de las vueltas, llegando a colocarse 3º y 5º, respectivamente, durante varias vueltas, llegando a disfrutar de un momento cumbre cuando Iannone llegó a adelantar a Marc Márquez (Repsol Honda Team) y Cal Crutchlow (LCR Honda Castrol) para situarse en cabeza de carrera.
Con el paso de las vueltas, el blando trasero pasó algo de factura a su rendimiento, aunque ambos apretaron los dientes y se mantuvieron muy competitivos en busca del podio pese a que tanto Márquez como Maverick Viñales (Monster Energy Yamaha MotoGP) y el propio Crutchlow comenzaron a distanciarse.
El papel de ambos supone la mejor clasificación histórica de Aprilia en MotoGP™, donde nunca dos motos habían estado tan arriba en la clasificación. Aleix, después de saborear otro Top 10, se mostró muy satisfecho en su valoración: «Esta es una pista especial para nosotros, diferente de los otros circuitos, y me divertí de inmediato tan pronto como llegamos».
«Nos mantuvimos consistentes con el mejor grupo que luchaba por el podio en una carrera divertida con muchos adelantamientos. Parecía una carrera de Moto3™, pero con motos mucho más rápidas y pesadas», explicó, antes de sacar a relucir su faceta más inconformista, al destacar aquello que echó de menos para ser todavía más rápido.
«Para ser aún más competitivo, habría necesitado más agarre en la parte trasera, por lo que no he podido rodar exactamente como esperaba, teniendo que recuperar mucho terreno al frenar», sentenció el de Granollers. Iannone, por su parte, también celebró una «carrera positiva» para sus intereses, después de haber «trabajado bien durante todo el fin de semana».
«Tuve un buen ‘feeling’ de inmediato y me di cuenta desde la primera sesión de entrenamientos que sería una buena oportunidad para nosotros. Obviamente, hubo muchos detalles que ayudaron, empezando por las características de la pista, y es una lástima que haya tenido un toque al final. Perdí un alerón y la moto ya no estaba perfectamente equilibrada», analizó el italiano, antes agradecer el apoyo a todos los implicados.
«Ha sido emocionante pilotar la Aprilia en cabeza y por ello quiero dar las gracias a todos los chicos de aquí y de Noale que están trabajando al máximo y al CEO que nos apoya en nuestro progreso. Espero poder darles más alegrías. Esta es sólo mi primera temporada con Aprilia y no ha sido precisamente sencilla, pero nunca nos faltó determinación y compromiso», sentenció Iannone tras un fin de semana clave para que Aprilia gane confianza en vistas un 2020 que se prevé plagado de novedades.